BUENOS AIRES / Argentina – IERPcomunica – La Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP) expresó su rechazo y repudio al fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Argentina que habilitó a que a un condenado por delitos de lesa humanidad se le aplique un cómputo diferencial de modo tal que su condena se le reduzca a la mitad.
A través de un comunicado firmado el 5 de mayo por el Pastor Presidente Carlos Duarte, la IERP repudió enérgicamente el fallo de la Justicia Argentina que permitirá que los condenados por delitos de lesa humanidad por crímenes cometidos en la última dictadura cívico militar entre 1976 y 1983, sean beneficiados con la reducción de su condena a la mitad de lo aplicado. Según el religioso, el fallo es una nueva violación a los derechos humanos, por lo que exhortó a los responsables de esta decisión la revean con el único fin de administrar justicia para el pueblo y dar tranquilidad a las víctimas.
«Indigna la decisión del máximo Tribunal en función de varios elementos: se trata de una aberración jurídica fundada en la aplicación de la ley más benigna –erróneamente- para delincuentes de lesa humanidad. Precisamente cuando en los casos de violadores de derechos humanos se establece que las condenas por delitos de lesa humanidad son imprescriptibles; y no pueden ser amnistiadas ni indultadas. Esta decisión de la Corte Suprema de Justicia sienta jurisprudencia y habilita a que otros condenados por los mismos delitos gocen de este beneficio», dijo el Pastor Carlos Duarte.
De esa manera, el Pastor Presidente llamó a que prime el equilibrio debido entre la gravedad de un hecho y la sanción impuesta dado que el fallo equipara a los condenados por delitos de lesa humanidad con los cometidos por personas comunes. Según el religioso, «los condenados por delitos de lesa humanidad han hecho uso de los instrumentos del Estado para atentar contra la integridad física de miles de seres humanos, han aniquilado a personas en el marco de un plan sistemático de muerte y terror». Por esa razón, consideró que la decisión del máximo Tribunal «representa un retroceso enorme en la búsqueda de memoria, verdad y justicia para un pueblo que desde hace más de 40 años las reclama y lucha por ellas».
La declaración del Pastor Carlos Duarte cerró a través de la cita de Isaías 10, que reza: “¡Ay de los que decretan estatutos inicuos, y de los que constantemente escriben decisiones injustas, para privar de justicia a los necesitados, para robar de sus derechos a los pobres de mi pueblo, para hacer de las viudas su botín, y despojar a los huérfanos!
