El ángel del Señor se le apreció a ella.
Jueces 13,3
Dios encamina la liberación de Israel a partir del nacimiento de Sansón, y por medio de un ángel le anuncia a una mujer que iba a quedar embarazada de este salvador. Claro que este texto nos trae a la mente y al corazón el relato del anuncio que el ángel hace a María, quien goza del favor de Dios, sobre el embarazo de Jesús. Dios rescata la importancia de personas que no solían ser relevantes ni mucho menos visibilizadas sus situaciones particulares. En estos casos lo hace con las mujeres.
En el caso de la madre de Sansón ni siquiera conocemos su nombre, ya que el texto la define como la esposa de Manoay además por ser estéril. La sociedad no la podía ver a ella como a una persona independiente de su funcionalidad asignada, la maternidad, ni tampoco del patriarcado, ya que sólo se la veía como la esposa de alguien.
Pero el ángel de Dios visita a las mujeres, habla con ellas, les anuncia la palabra y el mensaje de Dios. Dios las elije a ellas, como así también lo hará para revelar el hecho histórico más importante de la humanidad: la resurrección de Jesús, la tumba vacía. Mensajes y anuncios realizados a mujeres, a las que Dios les revela mensajes ocultos para muchos otros, especialmente a los varones.
¿Qué debemos hacer? Escuchar lo que tienen para decirnos, ya que Dios les ha hablado a ellas. ¿A cuántas mujeres estará hablando Dios hoy y no estamos escuchando sus anuncios? Para escuchar a Dios es muy importante poder hacer silencio, y dejarlo a Él que hable, como en este y en muchos otros casos, a través de las mujeres.
Martín Olesen
Jueces 13,1-25
