Oí el número de los que habían sido marcados: eran 144.000, pertenecientes a todas las tribus de Israel.
Apocalipsis 7,4
Hoy quiero invitarte a pensar sobre este número que nos marca el texto del Apocalipsis, que hace referencia a la cantidad de personas que se salvan.
En primer lugar, hay que tener algo en claro, que los números en la Biblia no son literales, sino simbólicos; dicen cosas que no se refieren a la cantidad sino al sentido. Como por ejemplo, el 7 habla de la perfección, el 40 de la prueba, etc.
Muchas veces nos enganchamos y angustiamos con la pregunta de quiénes son los que han sido salvados o elegidos, o vienen a nuestra puerta a decirnos que debemos unirnos ya a tal o cual denominación para ser parte de aquellos que se salvarán.
La pregunta debe ser al revés, o nuestro énfasis no debe estar puesto en esto, sino en cómo yo vivo la fe que Dios me regaló; cómo en mi vida se hace presente el crucificado y resucitado; qué hago yo para que el lugar donde me toca estar sea mejor, más justo; qué hacemos por cuidar nuestra naturaleza, lo que Dios ha creado y si vivimos como que Dios nos amó y nos salva, si vivimos sin miedo encontrando un Dios que nos libera.
Este día que comienza o termina, vívelo como Dios te ama y salvó, preguntándote cómo puedes vivir ese amor junto con otros. Cuando es así la salvación llegó para ti como para otros.
Como la playa, como el pasto verde, viento y refugio es el amor de Dios. (Canto y Fe Nº 207)
Javier Oscar Gross
Apocalipsis 7,1-8