Pues unos decían: “Juan el Bautista ha resucitado y por eso tiene este poder milagroso”.
Marcos 6,14
En la historia de la humanidad, muchas veces terminaron mal las personas que representaban una amenaza para los poderosos, porque hablaban o sabían demasiado y les convenía más hacerlos callar.
El texto de hoy no es la excepción, pues nos recuerda cómo mu-rió Juan el Bautista. También es el anuncio de lo que más tarde va a acontecer con Jesús. Juan le decía a Herodes que no estaba bien que haya tomado por esposa a la mujer de su medio hermano. Ésta toma venganza a través de su hija quien pide la vida de Juan, luego de que Herodes fascinado por su danza, promete darle lo que quiera a cambio.
Cuando Jesús empieza su ministerio, la gente habla de sus milagros y rápidamente crece su fama; algunos creen que es el profeta Elías que regresó para anunciar la llegada del Mesías; otros, como Herodes, creen que Juan resucitó, por eso está preocupado y le interesa conocerlo.
Jesús, siendo el Hijo de Dios, no se salvó de que lo condenaran a muerte por enfrentar a los poderosos, denunciar injusticias y ayudar a los oprimidos y marginados. Pensaron que así, podían callarlo para siempre… pero Jesús venció la muerte, resucitó y vivirá eternamente. Está con nosotros cada día de nuestras vidas, acompañándonos en nuestras luchas, ayudándonos a enfrentar nuestros miedos con coraje y en medio de las dificultades e injusticias; dándonos paz y fortaleza, para vivir con fe y esperanza, cobijados y redimidos por su amor. Que así sea. Amén.
Iris Bender
Marcos 6,14-29