MAR DEL PLATA / Argentina | IERPcomunica – Unos veinte adolescentes del barrio Bernardino Rivadavia de la ciudad de Mar del Plata están integrados a través de un taller sobre periodismo adolescente, que tiene como objetivo fortalecer y renovar el liderazgo juvenil, haciendo una lectura crítica de la realidad y decodificando el discurso de los medios hegemónicos de comunicación. Los adolescentes participan del espacio tres veces por semana en lo que se denomina «Arca Joven», siendo una actividad de la Iglesia Reformada local. El trabajo está coordinado por la Trabajadora Social Lucía Maureliz y el Periodista Lisandro Contreras y cuenta con el apoyo económico del Servició Evangélico de Diaconía (SEDI). Los protagonistas editan una revista basada en situaciones de la vida cotidiana recogidas en los barrios y en diversos espacios. A través de la publicación, exponen sus preocupaciones, gustos e ilusiones sin intermediarios tendenciosos, a la vez que reafirman su identidad.
El taller de periodismo adolescente está fundado a partir del proyecto «Arca joven» y se constituye como una actividad que se proyecta para fortalecer y renovar el liderazgo juvenil. Por otro lado, busca ser un espacio participativo, articulado entre el proyecto club de niños y los jóvenes de la Iglesia. Los adolescentes del barrio cuentan con su espacio los días lunes, miércoles y viernes donde participan de un taller de periodismo en el que realizan una lectura crítica de la realidad. Por otro lado, mensualmente se realizan jornadas entre el grupo de adolescentes y grupo de jóvenes, como festivales, talleres, entre otras cosas. El proyecto se desarrolla en el marco del «Club De niños», un proyecto que surge como iniciativa de la Iglesia Reformada en Mar del Plata, una comunidad de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP), cuya intención es de dar respuestas a las necesidades de la población infantil del barrio.
«Los medios hegemónicos emiten desde siempre mensajes prejuiciosos, sesgados y tendenciosos que van formateando el sentido común de una sociedad en cada momento histórico… claro que lo hacen para defender los propios intereses de los factores de poder a los que representan», indicó la Trabajadora Social Lucía Maureliz, quien se encuentra coordinando el espacio y trabajando en la búsqueda de valorar la comprensión de cada uno y cada una de las participantes del espacio, a través de su particular forma de ver la realidad. La revista que editan se constituye como una herramienta válida y con gran relevancia para los protagonistas del proceso: «ellos mismos planifican su cronograma de trabajo acompañados de un docente, ealizan entrevistas, salidas a campo y toman diversas decisiones, como la elección de la gráfica, los colores, los matices», contando de esa manera quienes son y de qué modo ven el mundo y el espacio que los rodea.
El barrio Bernardino Rivadavia se encuentra ubicado aproximadamente a unas cuarenta cuadras de la zona céntrica de la ciudad. Como característica más relevante en el barrio se encuentran dos manzanas aproximadamente con viviendas de construcción precaria y un complejo habitacional de gran envergadura: el Centenario. Dicho complejo fue creado hace casi 40 años por el Instituto Provincial de la Vivienda, está conformado por 16 manzanas y viven más de 20 mil personas. La población ha generado una identificación de la zona específica dentro del contexto del barrio, con una dinámica propia. Es una población heterogénea a la cual su juventud y niñez es vinculada con conductas violentas y dificultades de convivencia. Por su parte, el Club de niños funciona de lunes a viernes entre las 13 y las 16 horas y asisten más de 35 niños. Se desarrollan regularmente actividades como alfarería, taller de títeres, orquesta de niños y jóvenes, charlas de promoción de la salud, festivales comunitarios, salidas recreativas, participación en eventos barriales.