FELICIA / Argentina | IERPcomunica – La Junta Unida de Misiones (JUM) participó del Sínodo de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP) a través de su Presidente, el Licenciado Nicolás Rosenthal, quien llevó los saludos, agradeció el apoyo de la IERP, e invitó a los jóvenes y a las congregaciones a sumarse a la tarea que realizan con pueblos indígenas en el Chaco.
La JUM es una unidad ecuménica que trabaja en la provincia del Chaco desde hace más de 50 años, acompañando al pueblo, sobre todo al pueblo Toba, pero también al pueblo Wichi y a los Mocovíes. Es una institución ecuménica porque de ella forman parte la IERP, la Iglesia Evangélica Metodista Argentina (IEMA), la Iglesia Evangélica Valdense del Río de la Plata (IEVRP) y la Iglesia Los Discípulos de Cristo (IDC). Comenzó como una obra ecuménica en la época en que la tuberculosis hacía estragos en la población indígena. A lo largo de los años, ha desarrollando una obra que incluye la educación, el desarrollo humano y la promoción de la mujer.
«Tenemos mucha más población originaria de la que creemos, repartidas en todos los rincones del país, y sin embargo, hoy en día sus derechos no son plenamente aplicados», dijo Rosenthal, y continuó: «en Argentina tuvimos una reforma en el año 94 que garantiza la propiedad comunitaria de la tierra y todavía muchos pueblos originarios no tienen esa propiedad y les cuesta demostrarlo y están bajo la presión de muchas personas que quieren esas tierras, ya sea para ampliar la frontera agraria, para quitar la madera, o para otro fin». Por esa razón hoy hay un fuerte trabajo en todo lo que respecta a los derechos.
Así también, el Presidente de la JUM dejó claro que la situación de los pueblos originarios siguen siendo hoy los más excluidos de nuestra sociedad: «para nosotros, es muy importante el apoyo que nos brindan las iglesias que forman parte de la JUM, el hecho que se siga hablando de los pueblos originarios, que se visite también el trabajo en el Chaco».
La JUM promociona en el Chaco una educación bicultural y bilingüe, tratando de que los niños no solamente reciban cultura blanca en las escuelas, sino su propia cultura, en su propio idioma, lo que permite mantener las raíces que los sostienen a lo largo de la vida y para ello siempre se necesita colaboración y voluntarios: «los jóvenes voluntarios de la JUM organizan todos los años un campamento intercultural para el intercambio y queremos invitar a nuestras congregaciones que deseen participar», finalizó el Presidente Nicolás Rosenthal.