Ustedes saben perfectamente que el día del Señor llegará como ladrón en la noche.
1 Tesalonicenses 5,2
Dice un fragmento de la canción que hemos aprendido cantando en comunidad:
“Jesús, yo he prometido
servirte con amor;
concédeme tu gracia,
mi amigo y salvador.
No temeré la lucha
si tú a mi lado estás,
ni perderé el camino
si tú guiando vas”.
“Jesús, yo he prometido servirte” (Canto y Fe N°305)
No sabemos cuándo ni cómo será la venida del Señor, mientras tanto elegimos acercarnos a la palabra de Dios, pedimos su guía, rogamos por su ayuda. Sin embargo, muchas veces las interpretaciones que hacemos, la tradición, las decisiones, nos alejan de la esencia de sus enseñanzas.
Que podamos seguir generando diversidad de espacios que nos permitan acercarnos, encontrarnos en nuestra iglesia, para intercambiar ideas, reflexionar sobre su palabra, en búsqueda de mayor entendimiento y claridad para afrontar los interrogantes y desafíos a los cuales nos enfrentamos día a día, que muchas veces nos alejan de las sinceras intenciones de cumplir nuestra promesa.
“La verdad de tu palabra
es la luz de nuestras almas,
es el sol de nuestras vidas,
es un canto de esperanza.
¡aleluya, aleluya, aleluya!”
“La verdad de tu Palabra” (Canto y Fe N° 436)
Melisa Fischer