Prueben, y vean que el Señor es bueno
Salmo 34,8
«Dios es bueno todo el tiempo, y todo el tiempo Dios es bueno».
Incluso cuando atravesamos momentos difíciles, su amor nos sostiene y su misericordia nos cobija. Cuando las circunstancias nos agobian, debemos confiar en Él, porque siempre nos recibe con su inmenso amor. El Señor es fiel. Le pedí al Señor que restaure mi salud, ¡y Él me escuchó! ¡Alabado sea!
Oremos: Gracias amado Dios por vivir en comunión, gracias por la vivencia de tu existencia, gracias por los dones y por ser testigos de tu obra. Gracias por la dicha de sabernos hijos tuyos.
Gracias Señor por ser testimonio de tu infinito amor y bondad.
Te pedimos paciencia, fortaleza y la capacidad de esperar en las situaciones donde la desesperanza nos abruma. Te rogamos que nos concedas la sabiduría necesaria para actuar de acuerdo a las enseñanzas de Jesucristo.
Te suplicamos que siempre busquemos la justicia y el bien común en nuestro diario vivir. Que nuestras imperfecciones, vanidades y egoísmos se disuelvan, y que prevalezca siempre la voluntad de hacer el bien. Dios, perdónanos por nuestros pecados y por las acciones que puedan lastimar a nuestros hermanos. Permítenos purificar nuestros corazones de acuerdo a tu palabra. Amén.
Silvana Nagel
