1° domingo de Adviento
Estén ustedes preparados, orando en todo tiempo…
Lucas 21,36
“Todos los años viene nuevamente el niño Jesús (Cristo) a este mundo, en el que se encuentran los seres humanos”. Estas palabras representan un fragmento de un tradicional canto alemán que se canta durante el tiempo de adviento y Navidad. Recordamos al cantar el profundo significado de la venida de Jesús. Cada año, el niño Jesús regresa una vez más a este mundo afligido en el que vivimos. Y sí, desea seguir compartiendo su amor allí donde cada uno/a de nosotros/as vive.
Es un canto lleno de esperanza. Sin embargo, el pasaje de Lucas 21 también habla sobre la futura venida de Jesús, cuando ejercerá su juicio sobre toda la creación. Las imágenes de este pasaje pueden resultar un tanto intimidantes, y ese temor ha causado daño en ciertos aspectos. En diversos lugares, se predica para aumentar el miedo en lugar de promover la esperanza, enfatizando el riesgo de condena en vez de la certeza de que creemos en un Dios lleno de misericordia.
¿Qué acciones debemos emprender? ¿Cuál es nuestro rol? Quizás este versículo del Evangelio de Lucas responda de manera acertada. Lo que podemos hacer es mantenernos preparados, orando sin descanso, y confiando en que podemos acercarnos a Dios sin temor, ya que su amor y ternura se renuevan con cada nuevo amanecer. Nuestra relación con Dios no debe basarse en el miedo, sino en la confianza de que nos observa con amor y que siempre vuelve a nosotros para acompañarnos en nuestro camino.
Oremos, pidiéndole a Dios que venga a nosotros sin cesar, y estemos siempre dispuestos a escuchar su voz. Eso es estar preparados, vivir sin ningún tipo de temor. También en este año, al comenzar el tiempo de Adviento.
Que Dios te bendiga. Amén.
Christian Stephan
