Ana, se presentó en aquel mismo momento, y comenzó a dar gracias a Dios y a hablar del niño Jesús a todos los que esperaban la liberación de Jerusalén.
Lucas 2,38

Desde que Dios habitó, escogió ser Dios con nosotros, Dios con nosotras. Cuando el bebé Jesús fue presentado en el templo también Ana alaba a Dios y comienza a hablar de la presencia de Cristo a todas las personas que se acercaban al templo de Jerusalén.
Dios elige el lugar más humilde y a las personas menos pensadas para dar la Buena Nueva, Dios con nosotras y nosotros, “Emmanuel” es puesto en boca también de mujeres (las que no podían ser testigo en el tiempo de Jesús).
Hay buena noticia, Dios nos ha nacido en Belén, paz a los hombres y mujeres, esta es la buena voluntad de Dios para la humanidad.
Oración, te agradecemos Dios de bondad por la buena noticia proclamada, despierta vocaciones acorde al servicio de tu Reino, bendice nuestros hogares en este fin de año y renueva nuestra esperanza unidas/os a tus promesas. Amén.

Mariela Alejandra Pereyra

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