GENERAL RAMIREZ/ Argentina | IERPcomunica – Este viernes 13 de octubre los jóvenes presentes en el Sínodo 2018 presentaron un informe sobre los aspectos que consideran hay que profundizar y seguir trabajando. El mismo fue compartido por el Coordinador Juvenil Romario Dohmann y los y las jóvenes de los diferentes distritos, varios de ellos participantes de los talleres reformando, espacio que fue tomado como referencia para la elaboración de las líneas de trabajo, propuestas, sueños y esperanzas sobre las cuales están trabajando en este momento.
A continuación el informe completo:
Pastoral Juvenil – Objetivos y desafíos 2018-2020
Cambios esperados al finalizar el bienio 2018-2020
Mensaje de la Juventud IERPina Nosotrxs, 52 jovenes ierpines enviadxs por nuestras congregaciones teniendo representatividad de los 7 distritos, reunidos en el seno del primer encuentro de un proceso de capacitación trienal propuesto por el ECoJ denominado “REformando 2.0” nos preguntamos por la relevancia de ser jovenes ierpines hoy. Luego de conocer en profundidad la estructura de trabajo de la IERP y de haber compartido y puesto en común nuestras experiencias en las comunidades de fe, declaramos que:
1. Participación y liderazgo juvenil: Los y las jóvenes nos sentimos parte de la Iglesia hoy, ya que aportamos nuestros dones al servicio de la misma. No siempre los grupos juveniles o actividades donde se involucra a los jóvenes, tienen un diálogo con las comisiones directivas de sus congregaciones. Por lo que, proponemos que cada congregación
– Piense un espacio dentro de la Comisión Directiva en dónde se invite o se haga parte al menos a un/a joven.
– Que se tome en su agenda y en el presupuesto el trabajo de formación y capacitación de referentes juveniles.
2. A nivel Sinodal de la Iglesia Los y las jóvenes nos ofrecemos a ser colaboradores desde nuestras congregaciones y distritos en dos de las áreas de trabajo sinodales:
– En el área de comunicación: Proponemos al menos dos jóvenes por distrito como CORRESPONSALES con el fin alimentar las redes sociales de la iglesia y trabajar así en conjunto con el referente del área.
En el área de misión y educación: Proponemos colaborar en la actualización de un material para la confirmación, ya que entendemos que la misma debería tener como marco una formación integral que contemple la formación respecto de nuestra fe, pero que que abarque la formación de liderazgo en el marco del trabajo juvenil
3. El rol de lxs ministrxs en la actividad juvenil: Cada ministrx de la IERP en su ordenación se comprometió a trabajar con toda la comunidad, esto incluye explícitamente a la juventud. Entendemos que los contextos van cambiando y que la juventud de hoy no es la misma de otras épocas, por lo que proponemos:
– Un encuentro de fortalecimiento juvenil para ministrxs, diaconxs y laicxs juveniles referentes en dónde se trabaje de forma interdisciplinaria y se actualicen las herramientas y estrategias para ser facilitadores del trabajo juvenil hoy.
Consideramos que estas acciones podrán dar lugar a mayor participación e interés de los/as jóvenes de la vida de las comunidades en su totalidad.
ReformANDO 2.0. Por último queremos contarles que los resultados del primer ReformANDO fueron muy positivos, ya que los referentes enviados por sus congregaciones se comprometieron con replicar los talleres aprendidos no sólo en sus grupos juveniles sino también con adolescentes/ confirmandos, adultos, comisiones directivas, asambleas distritales, entre otros espacios en dónde los jóvenes replicaron lo aprendido durante el refomando. Las herramientas que brindó y sigue brindando con la segunda edición del proyecto “Reformando 2.0” han sido y siguen siendo un gran aporte para muchas comunidades, en las que se vio el interés que han puesto muchos de sus participantes en la vida de la Iglesia y el compromiso asumido en otros espacios, identificándose con gran orgullo como IERPinos.
En este sentido es que lxs jóvenes consideramos al espacio del ReformANDO, como un importante espacio de fortalecimiento juvenil que debe no solo continuar en el tiempo y sino que debe fortalecerse a nivel distrital y congregacional.
