Organizados por la Comisión de Formación Ministerial (COFORMI) de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP), se llevaron a cabo dos encuentros para estudiantes de teología, uno en la zona norte y otro en la zona sur del país, con el objetivo de reflexionar en torno al rol pastoral, compartir experiencias y fortalecer la vocación de servicio.
El primer encuentro se realizó los días 24 y 25 de mayo en la comunidad de Rosario (zona sur), con la participación de estudiantes provenientes de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe, varios de ellos ya en ejercicio pastoral. Fue coordinado por el pastor local Rudinei Bischoff, con la colaboración del diácono Rubén Mohr, quien además estuvo a cargo de algunos devocionales. El seminario abordó de manera profunda la identidad pastoral, incluyendo su dimensión misionera, el vínculo con la comunidad y los desafíos que plantea la tarea ministerial.
Durante la noche del sábado, los y las participantes se sumaron a una acción diacónica de la congregación, entregando viandas a personas en situación de vulnerabilidad. El domingo celebraron un culto comunitario que fue muy bien recibido por la congregación. La evaluación del encuentro destacó el valor de los contenidos, el clima fraterno y la utilidad de los recursos bibliográficos compartidos. «Hicimos un ejercicio en el que pudimos ver la cantidad de tareas que realizan los pastores, mientras que el rol pastoral no es resolver todo, todo el tiempo, sino acompañar, guiar y fortalecer a la comunidad», expresó el pastor Rudinei Bischoff a modo de conclusión de algunos diálogos.
El segundo encuentro tuvo lugar los días 27 y 28 de mayo en la localidad de Ruiz de Montoya, Misiones (zona norte), coordinado por la pastora Moara Benetti. Participaron el pastor distrital de Misiones, Darío Dorsch, y desde Paraguay, la pastora distrital Rufina Rapp. También acompañó el pastor local Hilario Tech y la vicaria Patricia Roggensack, junto a la comunidad anfitriona que brindó un cálido recibimiento.
En la jornada inicial, los y las estudiantes reflexionaron sobre su llamado al ministerio pastoral y compartieron cómo decidieron transitar este camino. Luego, elaboraron una lista de tareas pastorales, analizaron textos bíblicos y reglamentos de la IERP, llegando a una conclusión común: el rol del ministro o ministra no es hacer todo, sino acompañar, orientar y fortalecer a la comunidad. Esta reflexión permitió resignificar su vocación, al comprender que el exceso de responsabilidades puede volver el ministerio una tarea solitaria, pero también que el llamado se sostiene en comunidad. Los devocionales estuvieron a cargo de Patricia Roggensack (vicaria local) y el lector Alejandro Bartz (lector de la comunidad de Mbaracayú, Paraguay).
“Fue excelente. La manera en que la pastora Moara abordó el tema fue muy clara y dinámica, con ejemplos concretos que nos ayudaron a pensar nuestro rol”, compartió la estudiante Alexandra Griesbach. Además, destacó la importancia del reencuentro entre compañeros y compañeras, así como la hospitalidad de la comunidad anfitriona, que ofreció un espacio acogedor, evocando los encuentros en ISEDET por su valor para el intercambio y la construcción de vínculos.
Ambos encuentros formaron parte del acompañamiento que la IERP brinda a los 13 estudiantes de teología que actualmente se están formando en la Red Ecuménica de Educación Teológica (REET). La coordinadora de COFORMI, Norma Hermann, agradeció especialmente a las comunidades de Rosario y Ruiz de Montoya por haber recibido con generosidad los encuentros, fortaleciendo el compromiso de la iglesia con la formación ministerial.
Los encuentros concluyeron con una bendición que resonó profundamente entre quienes participaron:
“Que Dios te conceda para cada tempestad un arcoíris, para cada lágrima una sonrisa, para cada preocupación una promesa; y una bendición en cada aflicción, para cada problema una amiga o amigo fiel en quien confiar, para cada lamento una dulce canción, y una respuesta para cada oración.”