ALBA POSSE / Argentina | IERPcomunica – Por iniciativa de la Congregación Evangélica del Alto Uruguay (CEAU) y la Fundación Hora de Obrar de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP), este sábado 25 de enero de 2020, mas de 40 personas ayudaron a limpiar un sector del Río Uruguay. El trabajo se hizo en el marco de la Pastoral de Promoción del Cuidado de la Creación (PPCC) con la ayuda de embarcaciones y recorriendo las orillas y barrancas del importante afluente misionero. Se sumaron miembros de las comunidades evangélicas, vecinos, docentes, e integrantes de instituciones públicas de toda la región. Los y las participantes manifestaron la voluntad de seguir con el trabajo.
La actividad inició pasadas las 7 de la mañana a través de una reflexión bíblica del Vicario de la IERP Emiliano Torres, uno de los organizadores del evento, y se extendió hasta después las 12 horas. Contó con el acompañamiento de la Municipalidad de Alba Posse, la Prefectura Naval Argentina, así como la participación de Bomberos Voluntarios de Santa Rita, Policía de Misiones, Ministerio de Ecología, recolectores de basura y una gran cantidad de miembros de comunidades IERP y vecinos de Santa Rita, San Francisco, 25 de Mayo y Alba Posse que se sumaron de manera individual, contándose más de 40 voluntarios y voluntarias. Tuyo el apoyo de 5 botes, 3 kayaks y 3 lanchas, lo que permitió recorrer entre 7 y 10 kilómetros desde la zona conocida como «corredera de Alba Posse» hacia el sur, recolectando más de 200 bolsas de basura en su mayoría botellas y bolsas plástico, vidrio y en menor medida latas y metales. Estuvo presente el intendente local Lucas Gerahrdt, que puso a disposición un camión recolector y se comprometió con seguir apoyando la tarea.
«Hace un tiempo que venimos pensando en la limpieza del río, porque cuando íbamos al camping había mucha mugre y mucho vidrio», señaló Alicia Úrsula Müller, presidenta de la CEAU, indicando que la inquietud surgió en común con otros miembros de las comunidades de la IERP. «Hicimos lo que pensamos que hay que hacer, aunque sea un grano de arena en un lugar grande», evaluó y en ese mismo espíritu, invitó a que la gente «se sume y que vea que es algo muy importante». Müller se mostró todavía muy esperanzada y relató que cinco de sus seis nietos participaron de la actividad, destacando todavía que «esto es el inicio» y espera «que la gente se sume y que ayude, porque hay mucho para hacer».
La sorpresa de la mayoría de las y los voluntarios se dio el momento de iniciar el trabajo y descubrir que había tanta cantidad de basura en «la corredera», un lugar muy conocido y visitado por los habitantes de la región. Sin embargo, «hoy nos sentimos orgullosos de poder hacer algo por el medio ambiente y todos lo que participaron quieren seguir con la actividad en el futuro», precisó Ricardo Fredrich, docente de 25 de Mayo que participó en la organización de la jornada. Fredrich fue otro de los que se esperanzó en poder sumar a más entidades y personas para la próxima edición, así como comercios que puedan aportar elementos y materiales que son necesarios para el trabajo.
Por su parte, Romario Dohmann, Coordinador de la PPCC, destacó la diversidad de actores que participaron y que «además de poder recolectar basura, fue lindo disfrutar del paisaje que tiene el Río Uruguay, que estaba calmo y bajo». Dohmann definió el trabajo como una «actividad ambiental, en un marco excelente, que es nuestra selva misionera», además de vislumbrar el espíritu que crece y que indica que «las personas están cuidando su propio lugar para ellos y para las generaciones futuras».