Confía en el Señor y haz lo bueno, vive en la tierra y mantente fiel.
Salmo 37,3
¿Qué es confiar? Es tener la certeza de algo. Qué grande es el amor que nos tiene el Padre cuando nos dice: “Confía en mí, yo te cuido, pase lo que pase”.
Confiar significa encomendar nuestro camino. Cuando confiamos, encontramos paz, protección y satisfacción en un Dios que nos ama. Por eso, cuando te levantes, confía. Cuando vayas al trabajo, de viaje, confía.
Qué bueno y reconfortante es saber que alguien nos vigila, no para ver nuestros errores, sino para darnos la seguridad de ser amados y bendecidos. Pero hay un mandato: haz lo bueno.
Pero, ¿qué de bueno debemos hacer y para qué? Aquí hay una promesa: vivir en la tierra. De la tierra sacamos el sustento, confiando en que podemos alimentarnos de ella. Ahí va el pedido del Padrenuestro: “Danos hoy el pan de cada día”.
Ser fiel al Señor es ser agradecidos por todo. Confiar es saber que, cuando nos hacemos un estudio de salud, el Señor estará ahí para darnos fortaleza, y que cuando queremos hacer un viaje, Él irá con nosotros.
Tal vez estás pasando por un momento difícil o estás a punto de decir: “¡Dios, no puedo más! Ayúdame, por favor”.
La vida está llena de problemas; a veces parece que salimos de una y nos metemos en otra. Ya sea un problema de salud o financiero, nos sentimos sin fuerzas para seguir. Es ahí donde casi todos clamamos a Dios, porque sabemos que solo Él puede ayudarnos.
La buena noticia es que Dios nunca nos abandona. La Biblia dice: “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia” (Salmo 46,1). Él nos espera con los brazos abiertos, desea ayudarnos en momentos difíciles y está esperando que clamemos a Él con todo nuestro corazón.
Señor ayudame a confiar mas en ti.
Wirlene Schmechel