…como ofrenda quemada de aroma agradable al Señor.
Levítico 1,9
En el libro de Levítico encontramos muchas leyes que, con lujo y detalle, nos describen rituales de la época en que se escribe el libro, después que el pueblo hebreo hubo salido de la esclavitud de Egipto.
Una de estas tradiciones es justamente el “ofrecer sacrificios”. Así, el capítulo 1 nos narra detalladamente cómo debería ser ofrecido el sacrificio ante Dios, como búsqueda del perdón divino.
Al leer el final del versículo de Levítico 1,9 me vienen a la mente innumerables textos, tanto de los Salmos como del Nuevo Testamento, en los que se nos invita a tener una actitud de arrepentimiento y cambio en nuestra relación con Dios y con los demás.
Así lo expresa el Apóstol Pablo a los romanos: Por tanto, hermanos míos, les ruego por la misericordia de Dios que se presenten ustedes mismos como ofrenda viva, santa y agradable a Dios. Éste es el verdadero culto que deben ofrecer. No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto. (Romanos 12,1-2)
Ayúdanos, Señor, a caminar en tus senderos, amándote en nuestras hermanas y hermanos. Amén.
Ricardo Becker
Levítico 1,1-9