y nunca le faltará mi ayuda. Con mi poder lo fortaleceré
Salmo 89,22

Dios, me faltan fuerzas, sostén mis cargas para que no sean tan pesadas.
Dios, me falta energía, dame calor para que no pase tanto frío.
Dios, me falta emoción, infúndeme con tu amor para vivir plenamente.
Mira el vaso medio lleno y no medio vacío, dicen. Si querés, podés. Solo hace falta que visualices tus metas y las lograrás. Frases de autoayuda. Somos la generación de las frases de autoayuda. Cortas y marketineras. También somos la generación de la eterna juventud. Para cada dolencia tenemos un remedio. Somos la generación de la individualidad. Decimos estar conectados, pero estamos ensimismados. Somos la generación que no sufre. Mostramos nuestra mejor foto, dónde estamos sonriendo, sin arrugas ni desperfectos.
Somos, no importa la edad, somos todos de esta generación que no sabe pedir ayuda. Preferimos comprar un libro de autoayuda o leer una frase corta que nos distraiga por un rato. Pero no siempre podemos. No siempre estamos felices. No siempre tenemos fuerzas y no siempre tenemos emoción. Y a pesar de todo, el salmista dice que Dios formó con nosotros una alianza, para que nunca nos falte ayuda y poder que nos fortalecerá. Pareciera otra frase de autoayuda, pero no estamos solos. Somos ayudados y nos pueden ayudar. Y es que a veces simplemente tenemos que decir “no puedo” y Dios nos pondrá en el camino a personas que, quizás sin darse cuenta, nos dan fuerzas.
«Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas» (Canto y Fe N° 276).

Angie Stähli

Compartir!

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn
Share on whatsapp
WhatsApp
Share on email
Email
Share on print
Print