En Iconio, Pablo y Bernabé entraron juntos en la sinagoga de los judíos, y hablaron de tal modo que muchos creyeron, tanto judíos como no judíos.
Hechos 14,1
El texto nos cuenta de uno de los tantos viajes que hizo Pablo. Así los conocemos porque Pablo, después de los evangelistas, es la personalidad más conocida del mundo del Nuevo Testamento, tal vez con razón ya que dejó cartas con alto contenido teológico.
Aun así, muchas veces perdemos de vista mucha gente conocida, con nombre, que fue importantísima para la difusión del cristianismo. Uno de ellos es Bernabé.
Según el libro de los Hechos de los Apóstoles, Bernabé era un chipriota judío que se trasladó a Jerusalén, y, más tarde, la comunidad que se reunía en este lugar, lo envió a anunciar el Evangelio a los no judíos en Antioquia. (Hechos 11,22)
Bernabé fue un líder de la Iglesia de Antioquía y quien presentó a Pablo en esa comunidad. (Hechos 11,26)
Así como Bernabé hay mucha gente en nuestras comunidades que tienen historias de vida muy interesantes, en muchos casos han estado fuertemente ligados a la vida de las comunidades eclesiales, su rol ha sido importantísimo en la historia de la iglesia. ¿Conoces alguna? Tal vez puedas conversar con alguna persona de la comunidad de quien no conozcas nada de su vida a pesar de que siempre participó, tal vez haya tesoros y sorpresas en la gente más silenciosa.
La esperanza es trigo que Héctor siembra
Pedro cuida y Lázaro cosecha
La esperanza es pan que Rosa amasa
Julia pone al horno y Juan levanta en señal de comunión. (Canto y Fe Nº 240)
Cristina La Motte
Hechos 14,1-20a