La Federación Argentina de Iglesias Evangélicas (FAIE) envió este 23 de marzo, una declaración de la Junta Directiva en conmemoración de un nuevo aniversario del Golpe Cívico Militar que se llevó a cabo en Argentina el 24 de marzo de 1976. A continuación el texto completo.
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Por la Memoria, la Verdad y la Justicia
El 24 de marzo de cada año, el pueblo argentino tiene la oportunidad de reflexionar sobre los aberrantes hechos ocurridos durante la última dictadura cívico militar autodenominada «Proceso de Reorganización Nacional», que usurpó el gobierno del Estado nacional argentino entre el 24 de marzo de 1976 y el 10 de diciembre de 1983, dejando 30.000 desaparecidos, hijos y nietos sin encontrar aún y secuelas económicas de endeudamiento y destrucción del aparato productivo que perduran hasta el día de hoy.
Como Federación Argentina de Iglesias Evangélicas hemos afirmado siempre la necesidad de promover y defender el Estado de Derecho, la democracia, los derechos humanos y la preservación de la naturaleza buscando ser obedientes con el mandamiento del amor a Dios y al prójimo que nos fuera dado por nuestro Señor Jesucristo.
Hoy hacemos memoria de los horrores del pasado y clamamos justicia en favor de las víctimas, como así también exhortamos y nos comprometemos en la tarea de erradicar las expresiones sociales dominadas por el odio, el resentimiento, la avaricia y mezquindad. Asimismo reclamamos ante el Estado que desarrolle políticas públicas que garanticen al pueblo argentino el derecho a comer, a una vivienda digna, educación, trabajo, previsión social, salud, asistencia en la emergencia, justicia, seguridad, inclusión de las minorías. Que se garantice el derecho de todas las personas sin distinción alguna a vivir con dignidad. Son derechos humanos fundamentales que los Estados deben atender prioritariamente y por encima de cualquier tipo de demanda o interés sectorial.
Que Nunca Más el Estado sea cómplice de poderes que atentan contra la vida del pueblo.
Por más Memoria, Verdad y Justicia. Por una sociedad más justa, pacífica y ecológica.
Que así sea.
Pastor Leonardo Schindler
Presidente FAIE
