El cofre de Dios se quedó tres meses en casa de Obed-edom y el Señor bendijo a la familia de Obed-edom y a todas sus cosas.
1 Crónicas 13,14
¡Qué compromiso que le dio el rey David a la familia de Obed-edom! Nada menos que cuidar del cofre de Dios. Cofre que contenía el mayor legado de Dios, las tablas de los diez mandamientos.
Es interesante que cuando leemos unos versículos antes, el rey David tuvo temor de Dios por lo que le deja el cofre a la familia de Obed-edom. Hubo un percance que le produjo mucho miedo. Sin embargo, Dios responde a la familia que cuida del cofre bendiciéndolos.
Cuantas veces cuando tenemos miedo de algunas situaciones, optamos por alejarnos, por no hacernos cargo de las responsabilidades que se nos presentan. Hacemos como David, les damos la responsabilidad a otros sin darnos cuenta de que con ello también dejamos de crecer, de ser bendecidos, de aprender.
También hoy Dios se nos presenta de diversas maneras, debemos entender cómo responder ante los desafíos con valentía, con coraje para que Dios bendiga nuestro camino.
Oremos: Señor nuestro Dios ayúdanos a enfrentar con coraje los desafíos de éstos tiempos difíciles frente a tantas enfermedades y muerte, fortalece nuestra fe para que perseveremos en el amor a ti y a nuestros hermanos y hermanas. Amén.
Nancy Schreiner
1 Crónicas 13,1-14