Recoge una colecta entre los desterrados que ya han regresado de Babilonia: Heldai, Tobías y Jedaías. Luego, en el mismo día, vete a casa de Josías, hijo de Sofonías. Con la plata y el oro que hayas recogido, haz coronas, y ponle una en la cabeza al sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac.
Zacarías 6,10-11
“Yo no sirvo para nada”, quizás usted haya escuchado ese lamento, quizás muchos lo han pensado después de alguna desilusión, de algún proyecto que no funcionó. Lamentablemente hay personas que se hunden y no saben salir adelante. No obstante, Dios no nos deja sin nada, más aún nos da cosas que muchas veces no valoramos pero que están ahí para llevar adelante el Reino de Dios.
Zacarías vivió un momento desafiante: debía reconstruir Jerusalén y el templo, estaban rodeados de enemigos, sin embargo, Dios -en ese contexto tan adverso- le ofrece plata y oro. ¿Qué cosas te ha dado Dios? ¿Cuáles son el oro y la plata con que Dios te ha capacitado?, ¿te ha provisto para seguir adelante?
Veo al cristiano Nick Vujicic quien nació sin manos ni piernas, pero aun así, él, esa falta la considera algo que le ha dado Dios para vivir y dar vida. Cuando pienso en él veo mis manos y mis piernas, veo el conocimiento, mi educación, veo mi familia, veo mi Iglesia, y tantas cosas más, que al final solo debo reconocer que Dios ha sido bueno al proporcionarme lo que necesito para serle fiel.
Pidamos a Dios encontrarle sentido a lo que tenemos y a lo que no tenemos. Preguntarnos lo que Dios quiere para nosotros y saber en qué parte de su plan estoy yo.
Alexis Salgado
Zacarías 6,9-15
