ROSARIO / Argentina | IERPcomunica – La Congregación Evangélica Alemana de Rosario vivió dos días de celebración especial los pasados 4 y 5 de noviembre, conmemorando los 110 años de la inauguración de su templo, ubicado en el boulevard Oroño de la ciudad, en la esquina con San Lorenzo. El pastor Rudinei Bischoff, pastor de la congregación, compartió emocionado los detalles de estos eventos significativos. La celebración contó con la presencia del pastor presidente de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, pastor Leonardo Schindler.
El sábado por la noche, la congregación se reunió para disfrutar de un impresionante concierto de órganos. El templo, que recientemente renovó su órgano de tubos, único en su tipo en la ciudad con más de mil tubos de la fábrica Link, fue el escenario de este evento musical. Además, se llevó a cabo un conmovedor concierto de coro de cámara que deleitó a los presentes. Tras el concierto, se celebró un brindis y se inauguró el sistema lumínico exterior del templo, gracias al esfuerzo del grupo de jóvenes universitarios.
El domingo por la mañana, la congregación se unió en un culto celebrativo de Acción de Gracias, no solo por los 110 años del templo, sino también por los 129 años de la presencia de la comunidad evangélica en Rosario. Antes de la construcción del templo actual, la comunidad utilizaba el templo de la iglesia anglicana para eventos especiales. El pastor presidente de la IERP, Leonardo Schindler, compartió un mensaje especial durante este emotivo culto.
Tras el servicio religioso, se llevó a cabo la inauguración de un cartel conmemorativo que resalta los 129 años de fe en Rosario. El cartel, diseñado con el logo de la congregación, simboliza la espiritualidad y la continuidad de la fe a lo largo del tiempo. Participaron en la inauguración Mario Hellwig, vicepresidente de la congregación y presidente distrital, quien compartió palabras alusivas.
La celebración culminó con un almuerzo en el salón de la iglesia, organizado por los jóvenes universitarios. Más de 130 personas asistieron al concierto, y más de 80 participaron en el culto del domingo. El pastor Bischoff expresó su gratitud y optimismo hacia el futuro, destacando que la celebración fue una bendición que fortaleció la comunidad y la inspiró para enfrentar el futuro con confianza en la ayuda de Dios.
La congregación de Rosario mira hacia adelante con esperanza, confiando en que los próximos años serán tan prometedores como su rica historia de fe y comunidad.