Viernes 10 de octubre

 

Acuérdate de Jesucristo.

 

2 Timoteo 2,8a

 

Nos motiva a permanecer fieles a Cristo… Así como un velero es impulsado por el viento, cada uno de nosotros permanecerá fiel a Él si nos enfocamos y concentramos nuestra vida en los motivos de estos mensajes. Nuestra fe es movida por el poder del Evangelio. Por ello, no nos olvidemos de las palabras y obras de Jesús que nos fortalecen y dan vida.
En la carta de Pablo destacamos aspectos importantes para recordar:

– El mandato de recordar: Nos indica que debemos mantener a Jesús en nuestra memoria, centrar nuestra atención en Cristo. Esto implica mantener su persona y su obra como centro de nuestras vidas. Nos recuerda quién es Él y lo que ha hecho. Enfatiza su linaje real desde David y el cumplimiento de las promesas de Dios en el Mesías prometido.

– El sufrimiento: Pablo padeció a causa del Evangelio, llegando incluso a ser encarcelado. Los cristianos eran considerados criminales por negarse a adorar al emperador romano.

– El poder del Evangelio: Afirma que la palabra de Dios no puede ser detenida por ninguna cadena.

– El propósito del Evangelio: La razón que se da como motivación para soportar las dificultades es para que otros puedan escuchar el Evangelio para su salvación.

El Evangelio no le brindó a Pablo una vida de glamour y comodidades, sino que enfrentó desafíos marcados por el sufrimiento. Y nosotros, ¿qué vida elegimos cada día? ¿Qué hacemos para enseñar el mensaje de Jesús? ¿Cuánto tiempo dedicamos a las redes sociales, WhatsApp, etc., para compartir el Evangelio? ¿Cuánto tiempo gastamos comentando vidas ajenas en lugar de reflexionar sobre lo que hizo y enseñó Cristo? ¿Recordamos pensar en Él en esos momentos? ¿Nos acordamos de agradecer por todo lo que vivimos?

 

Mónica Rockembach

Compartir!

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email
Print