Después de esto, hubo paz en la tierra durante cuarenta años.
Jueces 5,31
Hoy se conmemora el día mundial de la lucha contra la desertificación y la sequía.
Cerca de tres cuartos la superficie de la tierra, que no está cubierta de hielo, fue alterada por el ser humano para satisfacer la creciente demanda de alimentos, materias primas, calles y hogares. Los especialistas coinciden que hay que buscar todos los caminos y hacer los mayores esfuerzos para revertir la cantidad de tierra productiva y los ecosistemas que se fueron perdiendo, para así garantizar la supervivencia a largo plazo de las personas y el planeta.
El programa “Crece Selva Misionera” es una acción que pretende acompañar la reforestación de más de 300 hectáreas de árboles nativos en bordes de arroyos y áreas degradadas, llegando a más de 180 mil plantas en 25 municipios de la Provincia de Misiones en Argentina. Su objetivo es aportar para mejorar las cuencas hídricas y así mitigar los efectos del cambio climático. Es una iniciativa de la Pastoral de Promoción del Cuidado de la Creación (PPCC) de la Fundación Protestante Hora de Obrar de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, que inició en octubre de 2020 y al día de hoy lleva varios miles de árboles plantados.
La destrucción de la creación está directamente vinculada con el sufrimiento, la pobreza, la migración y el hambre, entre otras injusticias. Sin embargo, quien decide cuidar la creación y hacer todos los esfuerzos para mejorar la casa común, ante los ojos de Dios es alguien que busca la paz.
Eugenio Albrecht
Jueces 5,1-31
