Pero la salvación de los justos es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
Salmo 37,39
La salvación es un don gratuito de Dios por medio de la fe; somos justos por gracia, no por mérito ni por obras. Este es un mensaje contracultural porque vivimos en una sociedad donde se valora el esfuerzo y el mérito personal. Todos los relatos provenientes de los medios de comunicación se enfocan en que el éxito nos dará la felicidad, y en algunas iglesias de la teología de la prosperidad se nos dice que el dinero ofrendado nos dará el éxito; todo esto es una falsa ilusión.
Esta enseñanza del Salmo la he visto en mi experiencia como trabajador social, donde he conocido muchas personas que, a partir de una experiencia profunda de fe, han logrado cambiar varios aspectos de su vida: dejar las adicciones, la violencia y el delito. Conocer esta forma de experimentar la fe en Dios me ha dado nuevos ojos para entender lo que significa confiar plenamente en Dios en medio de las dificultades y que significa la gracia.
Las experiencias de estos jóvenes en un Centro Comunitario en Montevideo son utilizadas por Dios hoy para ayudar a otros jóvenes que están enfrentando situaciones difíciles. El testimonio de su transformación de vida, junto con el apoyo de la comunidad y la fe en Dios, son piezas clave en el proceso de transformación. En el camino, no estamos exentos de angustia y momentos difíciles, pero Dios nos recuerda que no estamos solos para enfrentar esos momentos y que él es la fuente de toda salvación.
Oramos: Aunque pasemos valles de sombra, ayúdanos a no olvidar que vamos de tu mano.
Nicolás Schneider Iglesias
