Durante el reciente Sínodo de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP), se presentó un informe sobre la labor y el lugar que ocupan los ministros y las ministras eméritos, elaborado por el pastor emérito Juan Pedro Schaad y presentado por el pastor emérito Norberto Rasch, quien destacó la relevancia de este grupo en la vida de la iglesia. Aunque Schaad no pudo asistir, su trabajo fue fundamental para visibilizar el compromiso continuo de los jubilados en diversas áreas.
El informe resalta que los ministros eméritos están organizados a través de un grupo de WhatsApp llamado “Eméritas y eméritos”, que no solo incluye a ministros y ministras jubilados, sino también a viudos y viudas de estos. Actualmente, el grupo cuenta con 31 integrantes que mantienen una comunicación activa y cotidiana, facilitando la conexión entre quienes han trabajado en la IERP y aquellos que, aunque residen fuera de la cuenca del Río de la Plata, tienen vínculos con la iglesia. Además, se menciona que más de 60 personas se encuentran dispersas, principalmente en Alemania, con algunos de sus paraderos aún en proceso de localización.
En su intervención, Rasch subrayó que muchos jubilados siguen trabajando en espacios vitales para la IERP, incluyendo mujeres, diaconía, discapacidad y capacitación teológica. Esto pone de manifiesto que la experiencia y el conocimiento de los eméritos son un verdadero tesoro para la comunidad.
El pastor presidente de la IERP, Leonardo Schindler, también participó de este proceso, convocando a una reunión virtual el 17 de julio para discutir la representación de los ministros eméritos en el Sínodo. A pesar de que la primera reunión tuvo una participación limitada, el segundo encuentro, realizado el 25 de septiembre, reunió a 14 ministros y ministras, quienes abordaron la importancia de establecer un espacio formal dentro del Sínodo.
Entre las propuestas discutidas, se mencionó la necesidad de remunerar a los jubilados por servicios de suplencias y la posibilidad de organizar un retiro o encuentro para los eméritos, fomentando espacios de comunión y apoyo mutuo. También se destacó la relevancia de ser creativos para ayudar a este sector de la comunidad, especialmente en un contexto donde la sociedad tiende a descartar a los jubilados. El informe de los ministros eméritos es un recordatorio de la vitalidad y el compromiso de este grupo, que continúa aportando a la misión de la IERP, reafirmando que, como comunidad, es necesario cuidar y valorar la experiencia de quienes han dedicado sus vidas al servicio.