Yo soy el Señor tu Dios, que te sacó de Egipto, donde eras esclavo. No tengas otros dioses aparte de mí… No hagas mal uso del nombre del Señor tu Dios…
Éxodo 20,1-7
Nos acompaña en este día un texto que todos y todas conocemos muy bien. Es el texto de los 10 mandamientos (Éxodo 20, 1-17) entregados a Moisés en el Sinaí. Los primeros versículos hacen referencia a los dos primeros mandamientos: “No tengas otros dioses aparte de mí” y “no hagas mal uso de mi nombre”.
¿Qué significan estos dos mandamientos para nuestras vidas? Vivimos en una sociedad en que todos los días nos llegan ofertas para dar soluciones casi mágicas a nuestros problemas, muchas personas en su desesperación, llegan incluso a pagar grandes cantidades de dinero a cambio de ciertas soluciones. Dios nos invita a confiar en Él en todo momento, sobre todas las cosas y en cualquier circunstancia, pues Él es nuestro Dios, el Dios que liberó a su pueblo de la esclavitud.
Dios nos recuerda que su primera acción es la liberación-bendición para sus hijos e hijas. Así que, su nombre, no debe ser mal usado por nosotros y nosotras. Martín Lutero explica que el nombre de Dios no es para “maldecir, jurar, hechizar, mentir o engañar, sino para ser invocado en nuestras necesidades”.
En un tiempo donde el nombre de Dios es usado para explotar los más necesitados, para fundamentar discursos de odio, para excluir, para engañar y propagar noticias falsas, tengamos presente que temer y amar a Dios, significa, sobre todo, usar e invocar el nombre de Dios para el bien, para la paz, para la justicia, para bendecir y para que nuestro Dios nos libre y se haga presente en nuestras necesidades cotidianas.
Que Dios, en su infinita misericordia nos ayude a obedecer sus mandamientos y a poner nuestra confianza en que Él nos guiará y nos dará la fortaleza para enfrentar las situaciones de nuestro día a día. Amén.
Izani Bruch
Éxodo 20,1-7
Tema: mandamientos, nombre de Dios
