
Martes 1 de abril
Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos pareció que estábamos soñando Salmo 126,1 Cuántas veces nos sucede que nos
Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos pareció que estábamos soñando Salmo 126,1 Cuántas veces nos sucede que nos
Los que siembran con lágrimas, cosecharán con gritos de alegría. Salmo 126,4-6 En el contexto contemporáneo de nuestros países en Latinoamérica,
4° domingo de Cuaresma El hijo le dijo: “Padre mío, he pecado contra Dios y contra ti; ya no merezco llamarme tu
Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo les rogara a ustedes por medio de nosotros. Así pues,
Por lo tanto, el que está en Cristo es una nueva persona. Las cosas viejas pasaron; se convirtieron en algo nuevo. 2
Ese mismo día comieron panes sin levadura y trigo tostado, pero al día siguiente comieron ya de lo que la tierra producía.
Entonces el Señor le dijo a Josué: «Con esta circuncisión les he quitado la vergüenza de los egipcios.» Por esta razón, aquel lugar todavía
El Señor dice: “Mis ojos están puestos en ti. Yo te daré instrucciones, te daré consejos, te enseñaré el camino que debes seguir”.
Pero te confesé sin reservas, mi pecado y mi maldad; decidí confesarte mis pecados, y tú, Señor, los perdonaste. Salmo 32,5
3° domingo de Cuaresma Así que le dijo al hombre que cuidaba el viñedo: “Mira, por tres años seguidos he venido a